En ocasiones pasan situaciones que nos hacen olvidar lo grande que somos. Es ahí cuando activar el poder que hay en ti toma un valor gigantesco. Para lograrlo tenemos que depender de la automotivación.
Automotivarse es decidir tomar control de tu estado de ánimo para tener la capacidad y energía necesaria para conseguir los objetivos que te has propuesto. La característica principal de la automotivación es que el emisor y receptor de la motivación sea la misma persona. Tú serás el motor para activar tu propio poder. Por dicha razón, es de gran importancia aprender a trabajarlo correctamente para poder aprovechar todos sus beneficios y ventajas a nivel mental y a nivel de ejecución. Enséñale a tu mente cómo quieres que tu corazón se sienta. Las siguientes afirmaciones son buenas para repetir cuando experimentas baja autoestima o grandes adversidades y que, con frecuencia, lo que hacemos es autocriticarnos o pensar cosas negativas.
Afirmaciones:
“Me conozco, me acepto y estoy orgulloso/a de mí.”
“Me comprendo, me comprometo y amo mi progreso.”
Ahora, apoya tus palabras con acción intencional aplicando las siguientes técnicas para que líderes como tú puedan cultivar el poder que existe en ellos:
- Asume la responsabilidad de tu vida y no seas víctima de las circunstancias o culpes a otros por tus decisiones.
- Encuentra tu propósito como líder e identifica tus prioridades ante el tren de la vida.
- Toma decisiones y establece límites con nuestro entorno social o familiar.
- Ten claro tus ideales y sé fiel a tus propias creencias.
- Reconoce los errores como parte del progreso.
- Mantén una mentalidad de crecimiento
- Utiliza elementos para mantenerte enfocado como, por ejemplo: música, tablero de visualización, mapas mentales, entre otros.
Al comenzar a implementar estas estrategias, es posible que nos sintamos incómodos, ya que llevamos años sintiendo que no somos suficientes para afrontar ciertas adversidades en nuestra vida. Sin embargo, poseemos las herramientas para comenzar a progresar desde nuestro interior. El primer paso es comprometernos a ser consistentes en trabajar en nosotros mismos con las estrategias compartidas, ya que la clave de todo es la disciplina que mantengamos en nuestro plan para obtener resultados. ¡Activa tu poder!
