Por: Vaulting Ventures
El fundador de una empresa define en gran medida el desarrollo y éxito de ésta. Sin duda, las capacidades y experiencia que aportan los fundadores contribuyen a estos resultados, pero el recurso humano que reclutan es también un factor de gran peso. Construir un equipo diverso, experimentado y comprometido es posiblemente la tarea más importante del directivo de una empresa. Después de todo, es imposible que éste tenga peritaje en todas las disciplinas que se requieren para crecer el negocio. Un equipo exitoso requiere conocimientos complementarios, pasión por la misión de la empresa y compromiso con las metas trazadas.
Un error común es intentar sustituir estos elementos con factores como la confianza plena en la persona reclutada y la química que pueda existir. “Le tengo confianza” jamás debería sustituir el requisito de conocimientos y experiencias relevantes para el trabajo asignado. Sin embargo, muchos emprendedores siguen recurriendo a familiares y amigos para sus primeros reclutamientos. En la mayoría de las ocasiones resultando más en una novatada que en resultados positivos. El reto para muchos emprendedores es tener el dinero que requiere contratar personal de mucha experiencia y la preparación académica adecuada. La respuesta a este dilema está en mentores. Los emprendedores podrían beneficiarse mucho de un equipo de mentores con amplio y probado bagaje.Esto no añadiría gastos de nómina, riesgos legales para el mentor o empresa, ni el compromiso a largo plazo que supone el reclutamiento de un empleado. De hecho, el que un fundador de una empresa tenga la capacidad de convencer a un buen mentor de ser parte de su equipo habla muy bien de éste y su oportunidad de negocio. Después de todo reclutar un profesional experimentado, para que se comprometa a ayudarle voluntariamente (sin paga) representa un reto aun mayor que reclutar un buen empleado por un salario sustancial. Así que comenzar con una nómina pequeña complementada por un grupo selecto de mentores podría ser un equipo exitoso.
Después de todo reclutar un profesional experimentado, para que se comprometa a ayudarle voluntariamente (sin paga) representa un reto aun mayor que reclutar un buen empleado por un salario sustancial. Así que comenzar con una nómina pequeña complementada por un grupo selecto de mentores podría ser un equipo exitoso.