Por: Cynthia Martínez, My Barely Famous Life
En muchas ocasiones, relacionamos nuestras finanzas personales con la manera en la que nos sentimos, afectando nuestros niveles de convicción y seguridad ante los objetivos que queremos alcanzar día a día. Poco a poco vamos envenenando nuestra autoestima. A veces disfrazamos el veneno con chistes o lo justificamos diciendo “todo el mundo pasa por eso”. La realidad es que debemos dejar de ser víctimas de las circunstancias y decidir romper con esos patrones limitantes que nos hacen pensar que el dinero se esfuma como el agua y que no somos más que suficientes para actuar de manera consistente y constante para alcanzar nuestras metas financieras.
Hoy quiero darte unas estrategias para que tu autoestima te guíe en el camino para ahorrar y puedas comenzar a trabajar en esa salud financiera que necesitas.
Aquí te comparto lo que debes hacer cuando tengas un pensamiento limitante:
- Pensamiento limitante: El dinero no compra la felicidad.
- Mentalidad de crecimiento: Pero, me da paz mental para poder seguir progresando.
- Pensamiento limitante: Quien es tonto, pierde su dinero rápidamente.
- Mentalidad de crecimiento: ¿Qué aprendí de esa mala decisión financiera?
- Pensamiento limitante: Mientras más ganas, más gastas.
- Mentalidad de crecimiento: Manejo mi dinero ante la necesidad del presente, pero consciente de cultivar un futuro estable.
- Pensamiento limitante: Las mejores cosas en la vida son gratis.
- Mentalidad de crecimiento: Valoro lo importante de lo simple y lo esencial para el futuro.
- Pensamiento limitante: De centavo en centavo, se hace una fortuna.
- Mentalidad de crecimiento: Mi enfoque no es la cantidad, es empezar a trabajar en mi salud financiera.
- Pensamiento limitante: Nunca gasto el dinero antes que lo tenga en mis manos.
- Mentalidad de crecimiento: El dinero viene a mí frecuentemente. Se queda en mi vida y se duplica. Cuento con lo que tengo a mi alcance, lo demás se cultiva para mi futuro.
- Pensamiento limitante: Cuando se presenta una situación difícil, lo primero que hago es ir de compras para sentirme bien.
- Mentalidad de crecimiento: Entiendo la diferencia entre querer y necesitar. No tengo que hacer nada en el exterior para ser feliz, ya que mi alegría viene de adentro hacia afuera.
- Pensamiento limitante: La falta de dinero no es impedimento para vivir la vida que quiero.
- Mentalidad de crecimiento: Yo creo mis rodivias oportunidades y diseño la vida que amo.
Les confieso que había momentos que muchas de estas frases las usaba yo. No veía las limitaciones de usarlas y cómo afectan de gran manera a mi proceso de comenzar a ahorrar. Poco a poco vi los enemigos ocultos en ellas y cómo alteran nuestra relación con las finanzas personales, haciendo que no viera el sentido de urgencia ante no tener ahorros y comprometiendo el futuro financiero que me merezco tener. Intenta trabajar en tus pensamientos para que veas la manera en que beneficia tu habilidad de tomar una acción masiva ante tus metas y sueños.
Sobre la Autora:
Cynthia M. Martínez es conferenciante, estratega y empresaria con 12 años de experiencia en la industria de venta directa. Ha capacitado a líderes, vendedores y emprendedores para que alcancen su máximo potencial a través del liderazgo estratégico y la innovación para resultados masivos. Ella lidera una revolución positiva en las redes sociales, al proporcionar herramientas para ayudar a otros a alcanzar una vida extraordinaria, con el blog llamado: My Barely Famous Life.